Las nubes, artículo incluido en
el libro Castilla de Azorín, viene a ser un nuevo final que propone este autor
para la obra de Fernando de Rojas, La Celestina. En esta propuesta de Azorín
encontramos un final totalmente distinto al escrito por Fernando de Rojas en su
obra original.
Esta obra, repleta de
descripciones, se puede dividir en tres partes diferenciadas:
En la primera parte, Azorín hace una descripción detallada
de la casa donde Calisto y Melibea viven felizmente casados con su hija Alisa.
En la segunda parte describe a Calisto, el cual reflexiona
sobre el paso del tiempo,dando a entender que todo pasa y todo vuelve: Las
nubes son —como el mar— siempre varias y siempre las mismas. Sentimos
mirándolas cómo nuestro ser y todas las cosas corren hacia la nada, en tanto
que ellas —tan fugitivas— permanecen eternas.
En la tercera parte, vuelve a describir la casa y explica la
situación en la que Alisa conoce a un joven de la misma forma en la que lo
hicieron sus padres. Calisto al observar a su hija, recuerda la etapa en que
conoce y conquista a Melibea.
Como podemos observar, el tema principal del escrito es el
eterno retorno, esta vez representado por las nubes: “nuestro ser y todas las
cosas corren hacia la nada” “ellas, tan fugitivas, permanecen eternas”. Azorín
utiliza las nubes como un símbolo del paso del tiempo y va explicando la nueva
historia a partir de la comparación con estas. Se trata, al igual que las
nubes, de que todo, aunque cambien algunas cosas, en esencia sigue siendo lo
mismo. La hija conoce a un muchacho de igual forma que sus padres, por tanto,
se puede observar que la obra termina de forma cíclica; la historia se repite y
es porque el mundo está lleno de ciclos.
Para terminar, me gustaría comentar que reescribir finales
de historias es una propuesta interesante porque implica la comprensión de la
historia y una propia interpretación de la misma, lo que favorece también
estimular la imaginación de los alumnos.
Además, es muy recurrente la adaptación de obras literarias
originales para hacerlas llegar mejor a los niños. Por ejemplo, en La Sirenita,
pues en el cuento original la sirenita muere por no tener el amor del príncipe,
mientras que en el clásico de Disney, la princesa logra casarse con el príncipe
y derrotar a la bruja del mar. Algunas personas no son partidarias de realizar
estas adaptaciones porque las consideran un atentado contra la obra original.
Ahora bien, seguro que a casi todos nos ha pasado que estamos leyendo una
historia que nos está encantando, pero cuando llegamos al final nos decepciona
porque no era lo que esperábamos o no es de nuestro agrado. Por lo tanto, ¿por
qué no inventar un final alternativo que responda a nuestras expectativas y nos
guste? No debemos olvidar que unos de los fines de la lectura es
utilizarla como fuente
de placer…
No hay comentarios:
Publicar un comentario